lunes, 24 de abril de 2017

Ruta 37. Ruta Especial Cercana: Pantano de Alqueva Olivenza/Villareal - Cruzar pantano de Alqueva en Barco - Jurumenha - Alandroal - Terena - Cruce a Cabeca de Carneiro - Monsaraz - Mourao - Vva. Del Fresno - Alconchel - Olivenza/Villareal


Permitidme compañeros, 
que estas líneas se las dedique al hombre 
 de esbelta figura, de rodar tranquilo, 
buena persona y nada gañán. José Mari Barragan.
A las 7.15 h con puntualidad britanica
quince ciclistas
Nos reunimos
en el sitio de cuatro caminos
con caritas de sueño vespertino
pues el madrugon
habia sido fino
¿que digo fino?
digo ¡ bestial!
con lo que la siesta
no iba a tener final.
Así que, sin demora
procedimos sin más,
a colocar las bicicletas
  en su transporteta.
Cuál hábiles eruditos,
la operación  no nos llevó,
más de quince minutitos.
Posterior reparto en los coches
para salir pitando (7.30h)
hacia Villareal,
aún  de noche.
Este era el lugar elegido
     para embarcar,
y salir a rutear, 
entre España y Portugal.
Decir que la distancia rutera
era sideral (136 km) en verdad
nos vamos a jartar
ojalá el camión escoba
no tenga que actuar.
¡¡ Qué  bien se sube Catrapó
si en lugar de hacerlo en bici
 lo hacemos a "motó"!!.
Después de hacer el recorrido
hasta Villareal (35 km)
procedemos a las bicis habilitar.
Aquí,  se incorporan
dos compañeros más.
              A Paco
se le habían olvidao
la zapatillas de tacos,
con lo que tuvo que hacer
  una llamada urgente
para solucionar con su mujer
  un problema inminente.
       sobre las 8,00 h
los 17 animosos bicicleteros
ya dispuestos
           en este coqueto
puerto villarealero
con sus zodiacs y veleros.
Todo iba de lujo,
hasta que empezaron
         los tapujos.
"Al pasar la barca
nos dijo el barquero,
los niños bonitos,
  no pasan primero".
Por culpa del trihalon
el barquero nos retuvo
        un cojon
perdón,  un montón.
En la orilla de enfrente,
Jurumenha
con su fortaleza imponente,
contempla impenitente
             la partida
de los susodichos valientes
abajo, el guadiana
        testigo fiel
de mil luchas sin cuartel.
Por fin las bicis en el barco.
Pasamos sin demora
a la otra orilla
para el desembarco
y con mucho retraso.
Ya, comenzamos a rodar (9.53h) .
más las fuerzas
hemos de regular
ya que nos esperan duros km
           de pedalear.
            Con alegría
       y nada de desgano,
      enfilamos el Alandroal
               Alentejano.
      Todo este tramo hasta
                 Monsaraz
    es bastante duro de pelar
         con sus continuas
         subidas y bajadas
que dejan las patas tocadas.
                 A pesar,
     de la dureza del trazado
         el grupo mantiene
        un ritmo adecuado.
Íbamos pasando pueblecitos
          a un ritmo tenaz
      hasta que llegamos
a la maravilla de Monsaraz,
grata sorpresa nos llevamos
        los que por ahí
          nunca pasamos.
    Llegados a ese punto,
                 ahora,
     los ciclistas subimos
  como el rosario de la Aurora
         cada uno a su bola.
       Una vez todos arriba
       parada,  fotos y café
que nos sirven de relajación
para lo que vendrá después.
     la bajada de Monsaraz
     se hace rápida y fugaz.
  El ritmo hasta la frontera
         va en aumento
     favorecido por el viento.
       Entramos en España acelerando pero sin dar caña
       los km iban cayendo
 y las fuerzas disminuyendo,
       y el grupo deseando
que la ruta vaya finiquitado.
     Por momentos se oye,
         el silvido de Pepe
      cuando algún devenir
                acontece.
     El que pone cordura,
           por si hubiera
   actitudes poco maduras.
               Rata plan
     Pepe el gran capitán.
   Alconchel pasamos, más
       Olivenza viene después,
   villa que sigue siendo fiel
     a su pasado portugués.
La ruta ha discurrido sin egos
tan sólo Diego ha enrredao,
         con sus fobias
  a pensionistas y jubilaos.
¡¡ viejo!!, estoy ya cansao
    de mantener a jubilaos,
a lo qué este último refiere,
           tú,  a pagar
          Yo, a disfrutar
   ¡¡ es lo que hay chaval!!
    Cómo  es de entender
        la ruta sin Diego
           no podría  ser.
  Anima el joio hasta la sed
        y los pinchazos
  los arregla de tres en tres.
En fin...
llegamos a nuestro destino,
felices pero con los músculos
menos finos
que cuando salimos.
Todos hemos llegao
felices, aunque cansaos.
Hasta la próxima
compañeros
Ciao. 

Texto: José Leal Benavides
Fotografía: Club Ciclista Santa Isabel.

miércoles, 19 de abril de 2017

Ruta 35. Badajoz, Olivenza, Cheles, Badajoz


            La ruta de hoy se nos presentaba con 106 kilómetros a la vista. Tenía una cierta dificultad en el tramo Olivenza – Cheles.
            El día amaneció ligeramente nuboso, aunque las previsiones indicaban que tornaría a soleado. Mañana fresca.
            En esta ocasión 10 unidades partimos de la salida habitual, el buzón, a la hora indicada, a los que a lo largo del trayecto se sumaron 4 unidades más. Se nota que la gente ha dosificado, teniendo en cuenta el número de salidas seguidas que hemos realizado durante los días de fiesta de Semana Santa.
            Una vez atravesada la ciudad, ponemos rumbo a Olivenza, con el viento ligeramente a favor provocando un ritmo bastante aceptable para ser el comienzo de la ruta. En esta ocasión, y a diferencia de la mayoría de las rutas, algunos componentes ponen tierra de por medio sin mirar atrás. En rutas de este calibre, es mejor ir todos unidos y poner un ritmo aceptable para todos los gustos. De esta manera los que estamos un poco más flojos podemos sobrellevar mejor rutas rompepiernas como esta. Los 25 km de Oliveza a Cheles, aún teniendo en cuenta que el terreno es un continuo sube y baja, se hicieron a un buen ritmo . De esta manera llegamos a Cheles, donde hicimos la parada para el merecido avituallamiento.
            Después de recuperar fuerzas comenzamos el regreso, esta vez con algo de viento en contra y con pesadez en las piernas. Íbamos acusando el esfuerzo, y los kilómetros se iban acumulando en las piernas.
            Poco a poco fuimos recorriendo terreno y no tardamos en llegar a Olivenza. Desde aquí el trayecto se hizo más llevadero, ya que el terreno permitía un ritmo más constante.
            La única incidencia de la jornada fue un pinchazo que sufrió el amigo Deme, pero teniendo en cuenta la cercanía a Badajoz, optamos simplemente por inflar la rueda para poder llegar al destino, ya que el pinchazo era pequeño.
           
En definitiva, una buena jornada de ciclismo, que nos ha servido para disfrutar de un día primaveral transcurriendo por los bonitos paisajes de la Dehesa Extremeña en todo su esplendor, llenos de diversidad de colores y aromas.

Texto: José Leal.

lunes, 17 de abril de 2017

Ruta 33. Badajoz, Valverde, Táliga, Santo Domingo, Olivenza Badajoz. 92 Km.


          La mañana se presentaba como aquellas humeantes de terrenos irlandeses. El frío inicial fue sobrellevado con el arte y las gracias de nuestro compañero Jesús Cascón, que aunque no suele salir por estas fechas por aquello de la “Crucifixión” hoy nos alegró la mañana. Nos juntamos 12 unidades más 2 añorados compañeros Mero y Manolo iniciamos la marcha.
            Las piernas cargadas por las últimas hornadas tan seguidas y sin posibilidad de recuperación. Tomó la iniciativa Miguel, imponiendo un ritmo cansino de 28 Km/h, hasta que pasando la urbanización de Campo Pinos, es decir, a 10 kms de Badajoz, el bueno de Manolo Expósito sufrió un pequeño percance con las calas que nos vino de lujo para poder tomar un pequeño respiro. A partir de aquí, los ánimos se calmaron, y el ritmo fue más sostenido.
            Llegamos a la localidad de Valverde de Leganés, población poco conocida por los miembros de este Club. Una vez coronada la subida a Valverde, nos dirigimos a Taliga pasando por los numerosos “Taliganes” según se pudo escuchar por los bromistas del grupo. Entre arreones y espasmos vislumbramos las blancas casas de Táliga donde hicimos parada para tomar un reconfortante café.
            Rápidamente nos ponemos de nuevo en camino dirección a Santo Domingo. Las piernas de algunos, entre los que me incluyo, dan claras sensaciones de fatiga, y es queeee, “puto viejo” como diría Diego. A la sazón mi hermano, tomó con Pepe la cabeza, y claro, se olvidan de que el resto somos humanos. Llegamos a Santo Domingo, y en un plis a Olivenza vi, me sentí bien, ya perecía realizado lo mas duro, cuando de repente escucho un ronroneo musical. Un homenaje, escuché a Fernando, era algo así como “ eran las cinco de la tarde, los coches de choqueee, cantado por José Higinio José y respondido por Diego con un sonido mec mec, y una sirena, las risas se escucharon en el pelotón.
            Y mañana Portugal, qué Cruz, o te pones en forma o te quedas con la horma.
            Llegamos a Badajoz, jolín, esta ciudad es más linda de lo que la pintan, ¡¡¡qué fatiguita!!!.

Texto. Manolo Silva.

jueves, 13 de abril de 2017

Ruta 32. Badajoz, Valdebotoa, Alburquerque, Badajoz.

Empezamos compañeros
como de ocasión, 
a las 9 en el buzón,
con buenas dosis de ilusión.
Abordamos una jornada en esta Semana de Pasión,
aunque para este humilde escritor,
no tiene más connotación que vacación y relajación.
De la partida del buzón,
anduvimos prestos un montón  (18).
La jornada fue transcurriendo plácida.
¡Ya está Miguel acelerado!
Y ese grupo fraccionado.
Por detrás grita Pepe, ¡¡ un puntito menos para agrupar!,
que además,  hay que guardar,
a lo qué Diego replica, no, no hay que esperar Pepe,
que se pongan un puto cohete.
Entre dimes y diré tres nos plantamos en Valdebotoa que no en Albacete.
Ahora tira José, ahora Melchor,
no corras mucho que es peor.
Así, llegamos a los conejeros
que palabra compañero,
no pienses mal tenemos el miembro en el cerebelo.
Bajada generosa, 
que nos reconforta y anima
para, a la llegada al pueblo afrontar la dichosa subidina,
que a todos nos ponen las patas finas.
Llegamos compañeros a ese reconfortable café, 
para después volver a hacer la ruta al revés.
Vuelta buen ciclista, 
que la hicimos cuál  corredor de pista.
Llegando a nuestra ciudad
un poco cansado pero sin más.
Y ahora , me gustaría hacer alguna mención especial,
aunque no se me molesten los demás.
Ya en modo prosa, deciros que en general los compañeros suelen mostrar bastante solidaridad y consideración, respecto de los que tienen días malos. Pero si me lo permitís, me gustaría referirme hoy a Paco Vila. Enhorabuena por tu solidaridad al estar siempre pendiente, del compañero rezagado. (No os pongáis celosos que ya iré mencionando al resto coño que hay más días que ollas) Antonio, gran veterano y ciclista experimentado y gran jefe "del cartel".
Bueno ya esta bien de loas por hoy, mañana más.

Texto: José Leal.


Ruta 30. Badajoz, Alvarado, Cruce Entrines, La Torre, Almendral, Valverde, Badajoz.

        Comienza la jornada con un día típicamente primaveral, soleado y algo ventoso. Buena ocasión para aprovechar y practicar nuestro deporte favorito.
          Reunión como es costumbre en el buzón de cuatro caminos hasta la hora prevista de partida, después de una pequeña polémica si respetar los 5 minutos de margen o salir a la hora en punto. Definitivamente se respetaron dichos 5 minutos y comenzamos la ruta.
        Aproximadamente unas 18 unidades nos pusimos en camino. La mayoría salimos desde el buzón, y después hubo algunas unidades que se fueron incorporando  a posteriori.
          De primeras el viento era el principal protagonista, perjudicándonos en gran parte del recorrido, sobre todo hasta Almendral. Fue aquí donde hicimos la parada para el avituallamiento y el merecido cafelito.
         Hasta entonces el ritmo fue tranquilo, con una media de 24 Km. por hora. En cambio, el regreso fue bastante más activo, en gran medida por el beneficio del viento que nos permitía mantener buena velocidad, rodando con facilidad. Al final terminamos con 28 Km de media y en general bien, unos más cascaos que otros pero sin incidencias.
Texto: José Leal.

domingo, 2 de abril de 2017

Ruta 29. Ba. -Elvas - Jurumenha -Cruce a San Romao -Terrugem - Vila Boim - Elvas (por estación)- Caya -Ba.

   
    Buena jornada la de hoy. Amaneció un día soleado, como era de esperar, y estaba francamente bonito para la práctica de nuestro deporte. Inicialmente hacía fresco en las primeras horas del recorrido por tierras de nuestro querido país vecino Portugal. Seguimos sin ponernos de acuerdo con la indumentaria a utilizar. Unos salimos con ropa de invierno y otros de entretiempo. Pero es que el tiempo es de locos. qué ganas de que llegue ya el calorcito e ir en pantalón y manga corta.
    La ruta ha transcurrido sin incidencias, tan solo un pinchazo en la subida a Elvas, el cual se solventó de manera rápida y eficaz por los grandes mecánicos y voluntarios que componen este club, que habitualmente prestan su apoyo de manera altruista.
    Teniendo en cuenta que la semana pasada, por culpa de las inclemencias del tiempo, no pudimos cumplir con nuestro objetivo marcado en el calendario, este domingo, a diferencia, ha habido una gran participación. Sobre veinte unidades nos hemos reunido esta mañana para recorrer los aproximadamente 91 kilómetros de los que se componía esta ruta. Ritmo inicial tranquilo, con sus momentos de aceleración del grupo, provocando en algunas ocasiones el fraccionamiento del mismo. Además, el transcurso de la ruta por tierras lusitanas, ha estado caracterizada por los continuos toboganes, no permitiendo mantener un ritmo constante. Vamos, lo que normalmente denominamos ruta rompepiernas. Por lo demás la ruta ha sido magnífica, y sin problemas hemos cubierto esos 91 kilómetros. El rutero se va poniendo más exigente a estas alturas para prepararnos para la próxima ruta especial a Tentudía.

Texto. José Leal.